Tenemos una incomodidad o algo por decirle a nuestra pareja pero evitamos y dejamos pasar el momento para conversarlo, porque “¿y si se molesta?”, “eso seguro se vuelve una discusión”, “voy a dejar pasar el tiempo y se me olvida”, “voy a hacer de cuenta que no está pasando nada”... Y esto lo escucho en hombres y mujeres….
Así que ten presente esto:
A. Prepárale para la conversación, no le digas cuando esté conduciendo, justo antes de dormirse súper agotado o agotada del día, ni en una llamada… Este tipo de cosas hay que decirlas de frente cuidando mucho la forma en que nos expresamos, sin que eso signifique “maquillar las cosas”. ¡Son cosas diferentes! Es mejor decir: “Quiero hablar esto contigo y espero que ambos estemos dispuestos sin interrupciones, ¿lo hablamos esta noche?”.
B. La necesidad, inquietud o malestar es tuya, por algo eres tú quien desea compartirla, entonces dila en primera persona, sin señalar o atacar. Es diferente decir: “Esos amigos suyos que siempre vienen a estar de fiesta aquí no me gustan, usted que no sabe decirles que no cojan las cosas y dejan la casa vuelta nada”, a decir “Oye, no me siento a gusto cuando están de fiesta en casa, está pasando muy seguido. Es mi espacio para descansar y siento que toman cosas muy privadas sin permiso y se me hace irrespetuoso, ¿consideras otros espacios? Así cuidamos este que es nuestro, también te he sentido con malestar al otro día”.
C. Si quieres que algo desaparezca o cambie, propón siempre una alternativa. Por ejemplo: “No se está sintiendo chévere cuando me buscas, siento que me dices “vamos a hacerlo ya”, prefiero sentir que me buscas y me coqueteas… Eres muy bueno-buena cuando me insinúas esto y esto y esto… ¿lo intentamos así? Podemos disfrutarnos más.
Para comunicar una necesidad asertivamente no se requiere una fórmula mágica, que a veces es lo que buscamos.
Necesitamos identificar cómo cuidar a la otra persona sin minimizar nuestra inquietud, teniendo presente la mejor forma en que puedan recibírnosla. Así, vamos enseñando, también, cómo esperamos que nos cuiden.
Seguimos hablando EnConfianza, hasta pronto.
Juliana.